En pleno siglo XXI hay personas que mueren a causa de infecciones que los antibióticos actuales ya no son capaces de curar. Los antibióticos nacieron con la Penicilina para curar las infecciones provocadas por bacterias en un mundo donde el azote letal de estos microbios era enorme. La efectividad y rapidez de actuación de estos fármacos provocó un cambio de percepción y basó la responsabilidad de la curación en píldoras maravillosas en detrimento de los saberes ancestrales que fueron apartándose y olvidándose.
La época dorada de los antibióticos parece estar acabando. Así nos lo demuestran las continuas apariciones de cepas de microbios resistentes, fomentadas por el abuso de estos fármacos tanto en humanos como en animales.
Paralelamente, los efectos secundarios de los antibióticos plantean serias dudas acerca de su utilidad.
Todo parece dirigirnos hacia un futuro de bacterias descontroladas, replicándose a mayor velocidad de la que cualquier laboratorio es capaz de infundir a sus investigadores en la búsqueda de nuevas fórmulas antibióticas.
La falta de conocimiento de alternativas naturales a los antibióticos provoca muertes innecesarias. Pero sobretodo provoca mucha incertidumbre ante una situación que se aventura apocalíptica: el retorno de enfermedades que parecían superadas y la aparición y avance de otras nuevas.
Problemas con los antibióticos:
- Resistencia Bacteriana
- Efectos secundarios
- Acceso limitado a los fármacos
Pero esta previsión fatalista depende de nosotros que se cumpla.
La Tierra nos ha proporcionado desde hace miles de años un entorno en el que vivir. Los humanos han encontrado en ella las herramientas necesarias para progresar hasta el día de hoy. Pero como ocurre con nuestros electrodomésticos, una herramienta nueva ha ido barriendo a la anterior, y así nos encontramos que hemos olvidado como vivir en comunión con nuestro planeta.
Debemos retomar esas herramientas útiles y reconsiderar nuestra actitud frente al resto de seres vivos, tanto de los que vemos como de los minúsculos que no vemos.
Las alternativas naturales existen como han existido siempre.
Desde este blog sobre antibióticos naturales, podréis ir conociéndolas y hacerlas vuestras. Debemos difundirlas para que sean conocidas y evitar muertes evitables.
Alternativas naturales:
- Tratamientos con hierbas, setas, alimentos
- Aceites esenciales
- Homeopatía
- Manipulaciones manuales, acupuntura
- Terapias energéticas
