La Ciencia Huna enseña que el Ser humano está formado por tres “Seres”, “Yoes” o “mentes”. Para nuestra cultura estos serían: mente consciente, mente subconsciente, y el supra-consciente.
1. Para los kahuna: la mente conciente la llaman UHANE, “yo-medio” o mente consciente. Esta parte está consciente de su propia existencia y tiene la habilidad de razonar. Tiene además la particularidad del libre albedrío (libre voluntad) para obrar según le plazca, junto al yo subconsciente.
2.
La mente subconsciente es llamada por los kahuna: UNIHIPILI, “yo
bajo” o mente subconsciente. Esa es la parte del ser que
exterioriza la materia inconsciente y la presenta a la mente
consciente para que ésta
razone o decida a favor o en contra de ésta.
Este Uhane es el almacén de
memoria o todos los recuerdos y de las emociones. Cuando los Kahuna
se refieren a este “yo” como
“bajo” lo hacen para marcar
su ubicación física
y de ningún modo para denigrar o
descalificar, en este caso el yo bajo se encuentra localizado en el
plexo solar y casi nunca en la cabeza.
3. El tercero, es el "Yo superior" o supra consciente, llamado por ellos AUMAKUA. Ese es el más antiguo y totalmente confiable “yo” que posee naturaleza espiritual; éste vive en los planos superiores de la conciencia y fuera del cuerpo físico. Nunca interviene en asuntos terrenales a menos que se solicite que así lo haga. Se entiende que el Yo Superior se adhiere bajo la ley cósmica, de no intervención.
Se dice que el AUMAKUA tiene una misión más sutil y elevada que los Yo medio e inferior. Es la parte que sueña, tiene intuiciones y premoniciones, y las manifiesta a través del Yo subconsciente. La creencia enseñada por los kahuna es que el Yo superior es el que construye el futuro hilando a través de los pensamientos, esperanzas y miedos producidos por el Yo medio e inferior.
El Yo superior es capaz, según dicen, de prever el futuro tan lejos como sus pensamientos ser logren cristalizar. Pero como los pensamientos en el Yo medio e inferior de cada persona cambian a diario, del mismo modo el futuro cambia a diario también. Es por lo que los kahuna enseñan que la comunicación con el Yo superior ocurre con la mayor naturalidad a la hora del sueño, cuando dormimos. Es en esos instantes de contacto divino que los pensamientos del día son canalizados y utilizados, a través de algún mecanismo misterioso, y puestos en marcha para crear las condiciones de su materialización en el futuro.
La ciencia Huna enseña que cada “YO” tiene su propia función y el tipo de vida, la felicidad y la salud de cada persona tiene que ver con la integración, mezcla y armonización entre estos tres yo.
Luego también aseguran que el ser humano se halla constituido por diez elementos básicos.
Para entender esto habrá que estar claros en el concepto de la tríada primordiales de esta enseñanza que es Mente, Fuerza y Materia. La mente ya la detallamos (Uhane, Unihipili y Aumakua), y se dice que la fuerza o energía vital y básica de un cuerpo humano se encuentra dividida en tres voltajes. El voltaje más bajo es el del yo inferior. Pero cuando el Yo medio se sirve de esa misma energía, ésta sube de voltaje. Algo similar sucede cuando la misma energía que pasó por el yo medio sube al Yo superior entonces necesariamente se eleva de voltaje. En resumidas cuentas tenemos que la misma y básica “energía vital” de cada persona cambia conforme a cuál de los YO se halle usándola y cada uno se sirve de un voltaje diferente.
El último elemento de esta tríada es la materia. Huna enseña que cada YO tiene su cuerpo doble, copia o copia etérica. Estos cuerpos duplicados son copias fehacientes de todo lo que existe en el mundo físico y material. Son moldes energéticos sobre los cuales se construye la materia y se dice que todo lo que alguna vez haya sido creado ha tenido y tendrá ese cuerpo.
El doble del yo inferior es el molde sobre el cual se creado la materia y es exactamente idéntico al que podamos ver visualmente. También dicen que es en ese cuerpo doble del yo inferior donde se archivan todos los recuerdos y memorias de la vida de ese cuerpo. En cuanto al yo medio, su doble cuerpo energético se encuentra localizado en la cabeza, donde ubicamos nuestra cabeza físicamente. Ambos Seres, medio e inferior, se interconectan por hallarse penetrados en el cuerpo físico.
El Ser superior también tiene su doble, pero la diferencia es que no se halla penetrado en el cuerpo físico, únicamente se encuentra conectado a la persona a través de un cordón con la zona del Ser inferior. A este cordón también se le conoce como el cordón de plata.
Con ello concluimos los 9 elementos: 3 mentes, 3 voltajes del mismo tipo de energía y 3 materias o cuerpos. El décimo es el cuerpo físico, donde se encuentra amalgamados los 9 elementos anteriores de la persona que transporta y sirve de vehículo para la totalidad del Ser.
La ciencia Huna recalca las cualidades del Aumakua o Ser Superior que son: compasión, paciencia, amor, perdón... Es finalmente el ideal que el Ser medio o Uhane aspira alcanzar, un paso más allá de las habilidades del poder mental y creatividad. Además, el Aumakua es considerado de alguna manera una combinación de comunidad de espíritus porque la perfección de cada uno vibra al unísono con el Ser superior de todos los espíritus. La perfección es una y todos vibran en la misma dirección, por tanto pareciera que todos fueran uno y separados a la vez.
Los cuerpos dobles de los tres seres se encuentras formados por una sustancia llamada “Aka”. Aka tiene una cualidad húmeda y elástica que puede estirarse ilimitadamente sin romperse. Además esta sustancia es el mejor contenedor y conductor de la fuerza vital o energía básica y según los kahuna, el doble del ser inferior es capaz de cambiar la forma temporalmente o permanentemente en hilos para conectarse entre los seres medio y superior. Si la persona ha desarrollado una armoniosa relación entre el yo inferior y superior entonces seguramente ha logrado desarrollar esos hilos o un cordón que comunica a ambos. Es a través de ese cordón aka que viajan la fuerza vital y la formas de pensamiento.
Para entender mejor esto, digamos que cada vez que usu Uhane –usted-, contacta con sus otros seres, o piensa en alguna cosa o alguna persona, usted está enviando un cordón aka. Digamos que usted contacta con alguna persona, en ese mismo momento se crea un hilo largo que conecta a ambos.
Si el caso es que vuelve a contactar a esa persona vuelve a salir otro hilo entre ambos y futuros contactos hacen un cordón cada vez más fuerte. Es por ello que personas muy allegadas exhibirían cordones aka muy fuertes.
Los kahuna explican que la comunicación telepática tiene que ver con el cordón aka, a través del cual viajan la fuerza vital y las forma- pensamientos. Esta comunicación telepática de intercambio de energía vital y pensamientos puede ocurrir entre: los tres seres del ser humano y también entre dos personas que tengan una conexión poderosa entre sí por el cordón aka.
Cada pensamiento que se cree en nuestra mente tiene también su cuerpo doble o etérico a su alrededor. Al ser creado un pensamiento éste es atrapado por un hilo aka y unido al pensamiento que vino antes de éste. A esto se aplica el concepto de “asociación de ideas” en nuestros tiempos modernos. Por lo que podemos concluir, según los kahuna: un pensamiento dado atrae hilos de todos los pensamientos similares.
Otro aspecto importante es el concepto del “maná” o fuerza vital. El maná para ellos es la energía básica que se encuentra en todas las cosas. Los kahuna enseñan que el mana es obtenido por el Unihipili desde la comida y el aire, y almacenado en el doble-etéreo del cuerpo del ser inferior. Esa fuerza vital conservada en el ser inferior o Unihipili puede ser utilizada para todo aquello que desee el ser medio o Uhane. Cuando el ser medio, -consciente o Uhane- utiliza esta energía el maná se eleva desde el cuerpo doble del yo inferior hasta la cabeza física –región del yo medio, y durante el trayecto hacia arriba esta energía cambia de algún modo delicado. Esta elevación de la energía la conocemos como la “voluntad”. Cuando el yo medio no ejerce su “fuerza de voluntad” como debería, el yo inferior actúa de un modo errante, de una actividad a otra, sin poder ejecutar efectiva y correctamente sus actos o ideas.
El Unihipili se comporta como un niño. Necesita ser querido y amado, pero también ser tratado firme y disciplinadamente. Si un niño real no es disciplinado correctamente se desboca en su conducta. Lo mismo ocurre con el ser inferior; es por ello que es indispensable utilizar el maná y elevarlo como fuerza de voluntad. El Ser medio o Uhane es en este caso la parte razonante que actúa como el padre que guía al ser inferior, del mismo modo como lo es el Ser superior para el ser medio. Los tres yo son una armoniosa graduación de la “conciencia”.
Los kahuna creen que Dios es una tríada, del mismo modo que los humanos somos tríadas. Así como Dios es Trino, el Ser Humano es TriUno. Ellos aseguran que Dios es la trinidad de niveles espirituales, a los cuales llaman Ku, Kane y Kanaloa. Del modo similar como otras religiones tienen la misma certeza, tal el caso de los Cristianos: Padre, Hijo y Espíritu Santo; o como los Indúes: Brahma, Vischnu y Shiva. Los kahuna aseguran que el proceso de la evolución tiene que ver con moverse a través de estos niveles de conciencia de regreso al creador Uno o Ku.
Rezar u orar al Ser superior es similar al proceso que se realiza entre el yo inferior y el medio. Una vez que el Ser medio, o Uhane elevó la fuerza vital desde el cuerpo etérico del ser inferior para ser usado como fuerza de voluntad, éste puede hacer lo que quiera con ella. Por ejemplo puede usarlo para hacer ejercicios, controlar al ser inferior, o rezar, pensar o cantar o lo que desee. Pero el proceso de rezar al ser superior o Aumakua involucra elevar la fuerza vital -energía o maná- hacia arriba desde el ser medio hacia el próximo voltaje.