El mayor obstáculo para experimentar esta realidad es la identificación con la mente, que hace que el pensamiento se vuelva compulsivo. Ser incapaz de dejar de pensar es una enfermedad terrible.
Este ruido mental incesante impide encontrar el reino de quietud interior que es inseparable del Ser. También crea un falso yo fabricado por la mente que lanza una sombra de miedo y sufrimiento.
Este ruido mental incesante impide encontrar el reino de quietud interior que es inseparable del Ser. También crea un falso yo fabricado por la mente que lanza una sombra de miedo y sufrimiento.
El momento presente contiene la clave de la iluminación, pero no puedes encontrar el momento presente mientras seas tu mente.
Nota: La mente es un instrumento soberbio si se usa correctamente. Sin embargo, si se usa incorrectamente se vuelve muy destructiva. Decirlo con más precisión: No se trata tanto de que usas la mente equivocadamente, generalmente no la usas en absoluto, sino que ella te usa a ti. Esa es la enfermedad. Crees que eres tu mente . Ese es el engaño. El instrumento se ha apoderado de ti.
LIBERARTE DE TU MENTE
Hay buenas nuevas: puedes liberarte de tu mente y dar el primer paso ahora mismo:
Hay buenas nuevas: puedes liberarte de tu mente y dar el primer paso ahora mismo:
- Empieza a escuchar la voz que habla dentro de tu cabeza. OBSERVA AL PENSADOR. Escucha imparcialmente , no juzgues no condenes…significaría que la misma voz ha vuelto a entrar por la puerta de atrás.
- Cuando escuches el pensamiento, siente como si hubiera una presencia consciente- tu yo profundo- por debajo o detrás de él. De este modo el pensamiento pierde su poder sobre ti y se disuelve rápidamente. Ya no energizas tu mente mediante la identificación con ella. Es el principio del fin del pensamiento compulsivo e involuntario.
- En lugar de “observar al pensador” también puedes crear una apertura en la corriente mental por el simple hecho de dirigir el foco de tu atención al ahora.
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